Los jardines, balcones, terrazas o patios reciben nuevos usos. Se crean en ellos espacios que invitan a la reunión alrededor del fuego. Una escena ancestral que hoy toma un protagonismo inigualable.
Los fogoneros pisan fuerte y ganan metros incorporándose de una manera natural al entorno que los recibe.
Distribución:
El fogonero en el centro, claro. Pero cómo lo acompañamos, cómo definimos de qué modo se configurará este espacio es clave para que cobije, invite y no interrumpa. Para lograr una integración, será preciso seleccionar cuidadosamente los materiales con los que se construirá el equipamiento, las superficies de descanso, el piso que delimitará el nuevo “ambiente” y claro, las dimensiones mínimas para que la reunión alrededor de las llamas sea placentera, armónica y cálida, además del uso que le daremos a este nuevo escenario.
Propósito:
Lo primero que debemos respondernos es qué uso le daremos, qué esperamos de él. ¿Quiero que este lugar sea únicamente para reunión o también me gustaría que fuera apto para cocinar? Según esa respuesta, las dimensiones serán diferentes, así como los elementos que seleccionaremos para diseñarlo. Luego aparece el gusto de cada uno a la hora de ambientarlo.
Piso: el material más habitual es la piedra partida. Es accesible y fácil de instalar. También está la madera como recurso, que sin lugar a dudas aporta una calidez adicional al espacio y se amalgama a la perfección con el jardín, dotándolo de una continuidad natural.
Mobiliario: en casi todos los casos se presenta de madera. Lo que varía en gran medida es el color, la preponderancia de las vetas, la forma y densidad. Están quienes optan por sillones y bancos de líneas simples y livianos, para no generar saturación visual, así como quienes prefieren equipamientos robustos de maderas muy duras, que evoquen una atmósfera rústica, fresca. Hay una gran variedad de alterativas. Las maderas más habituales son el ciprés, el eucaliptus, el quebracho y el incienso.
Cielo: una cuota distintiva podrá estar dada por la iluminación. La misma permite crear un clima especial. Una alternativa fácil de llevar adelante y que genera un cambio rotundo es la incorporación de luces de quermés, colgadas de una simple estructura de madera que permita contenerlas y sostenerlas. Incluso no es necesario contar con conexiones cerca, porque existen opciones de energía solar, que funcionan a la perfección.
“Nuevos usos, nuevos hábitos. El cambio es la constante. Los espacios fogoneros si bien no son nuevos, porque su existencia es ancestral, sí han aparecido como un nuevo ambiente del hogar, que nos permiten extender nuestro disfrute del exterior, tanto en noches frías de invierno, al calor de las llamas, como en atardeceres cálidos, que nos proponen reunirnos para tener momento de disfrute al aire libre. La madera es sin lugar a dudas el material por excelencia de estos nuevos ambientes, porque combina perfectamente con el escenario, con el entorno, permitiendo una integración ideal con el jardín y la naturaleza. Estos rincones, sin lugar a dudas, permanecerán en los hogares de los argentinos y, por ende, será conveniente protegerlos para seas testigos de cientos de encuentros al calor de las llamas” comentó la Arq. Viviana Insaurralde, especialista en MKT para la línea Woodcare en Sudamérica.
Tips Cetol de protección, qué con qué.
- Para mobiliarios y estructura de madera: Cetol Belleza Natural conserva la madera tal cual es, con terminación mate y completamente incoloro. Para quienes quieren sumar color, pueden optar por Cetol Classic Balance, que viene en 6 tonos y dos terminaciones (Satinada y brillante).
@ce.ce_piume especialista en tendencias en madera, diseñadora y fabricante, recomienda conocer las propiedades de este noble material a la hora elegir los muebles. “Hay maderas semi duras que
tienen una estética llamativa, sin embargo, lo mejor para estos espacios son las duras, siempre protegidas para garantizar su durabilidad y su belleza. También hay que tener en cuenta cuando
elegimos un mobiliario si requiere de colchonetas y el cuidado que éstas necesitan”. - Para deck: Cetol Deck Balance, 6 colores y dos terminaciones.
- Su mantenimiento: Muchas veces, al ser espacios que están expuestos 100% al exterior, olvidamos que, como todo en nuestro jardín, requieren mantenimiento. Ya entramos en la época de observar nuestras maderas y en caso que sea necesario y se observen el desgaste de su brillo, con solo una lija suave y una mano pura de Cetol, quedan listas para la nueva temporada de tardes cálidas al aire libre.
En todos los casos, por ser tecnología Balance, se aplican 3 manos dejando pasar 3 horas entre cada una, los pinceles se lavan con agua, los productos vienen listos para usar y tienen bajo olor.